Los agujeros donde se fijan las puntas de acero se llaman focos de la elipse. Si mantienes tenso el hilo, podrás ver que el trozo de hilo que va de un foco al otro pasando por el bolígrafo es siempre el mismo. Por eso se dice que la suma de las distancias de un punto cualquiera de la elipse a los focos es constante.
Si colocas los focos más separados, resultará una elipse más excéntrica. Por el contrario, si acercas los focos, la elipse se parecerá más a una circunferencia.